La detención de Walter Bustos se produjo el pasado 17 de mayo, en relación con las acusaciones de abuso sexual en contra de un joven que asistía a la parroquia de Valle Fértil en 2017. Es importante destacar que el sacerdote ya había sido condenado a 1 año y 8 meses de prisión por abusar de otro menor de 15 años, y la Fiscalía había apelado esta sentencia ante la Corte.
El juez Sanz basó su decisión en la creencia de que Bustos podría intentar fugarse, ya que enfrenta la posibilidad de recibir una pena de prisión efectiva en la nueva causa iniciada el 2 de mayo de este año. En esa fecha, un joven denunció en el Centro de Atención a Víctimas de Delitos Sexuales (CAVIG) que había mantenido relaciones sexuales con el cura cuando era menor de edad y asistía a la parroquia de Valle Fértil.
El magistrado también argumentó que Bustos, en libertad, podría influir en testigos que aún no han declarado en el caso, lo que podría entorpecer la investigación.
El sacerdote continuará cumpliendo su prisión preventiva en la casa de sus padres, donde se le ha colocado una tobillera electrónica desde el 22 de junio pasado. La extensión de la prisión preventiva fue solicitada por el fiscal Mario Panetta Sopelsa (UFI CAVIG), quien argumentó que aún falta incorporar testimonios y llevar a cabo pericias psicológicas tanto en el sacerdote como en su denunciante.
La abogada defensora de Bustos, Sandra Leveque, expresó su oposición a que su cliente permanezca detenido. Argumentó que el fiscal había utilizado los mismos fundamentos que ya se habían presentado en junio para extender la prisión preventiva. Leveque también destacó que las demoras en la producción de pruebas necesarias para la Fiscalía no pueden imputarse a su cliente. Tras conocer la decisión del juez, anunció su intención de apelar ante un Tribunal de Impugnación.
El delito que se le atribuye a Bustos se enmarca en el artículo 120 del Código Penal, que aborda los casos en los que el autor se aprovecha de la inexperiencia sexual de la víctima. En esta situación, se agrava aún más debido a la condición de ministro de un culto religioso del acusado, un detalle resaltado por el denunciante al relatar que se había acercado a Bustos en busca de apoyo emocional y se sintió contenido, hasta que el sacerdote le propuso mantener relaciones sexuales.
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