El sacerdote Walter Bustos, de 46 años, se encuentra actualmente en el centro de una compleja situación legal en San Juan. En primer lugar, Bustos enfrenta un juicio oral por abuso sexual simple, delito del que se le acusa en perjuicio de dos menores de edad que forman parte de su entorno familiar. Sin embargo, la situación se ha vuelto aún más complicada, ya que recientemente ha sido vinculado a otra causa por presunto abuso sexual que está siendo investigada por las autoridades.
La abogada defensora de Bustos, Sandra Leveque, ha tomado medidas legales en un intento por garantizar un proceso justo para su cliente. Leveque ha presentado una recusación contra el juez de Garantías, Diego Manuel Sanz, quien lleva el caso. Su argumento principal es que el juez ha asumido facultades que corresponden a la fiscalía y ha tomado decisiones basadas en argumentos que no fueron presentados ante él. Uno de los puntos más controversiales fue la negativa del juez a renovar la prisión domiciliaria de Bustos, alegando riesgo de fuga debido a la nueva acusación en curso. La abogada defensora sostiene que esto demuestra una pérdida de imparcialidad por parte del juez, lo que ha llevado a la suspensión temporal de la medida. En consecuencia, Walter Bustos permanece bajo arresto domiciliario mientras se resuelve esta compleja situación legal.
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