El cardenal Angelo Becciu, otrora uno de los cardenales más poderoso de la Santa Sede, fue condenado esta tarde a cinco años y seis meses de cárcel en el llamado “proceso del siglo” por el Tribunal Vaticano.
Otros nueve imputados en el jucio que tuvo 86 audiencias y duró dos años y medio, celebrado en un aula de los Museos Vaticanos, están acusados por delitos de fraude. Devío de fondos, abuso de poder, corrupción y extorsión.
El promotor de justicia (fiscal) Alessandro Diddi, pidió penas de cárcel de entre casi cuatro años hasta mas de trece, junto con sanciones a los otros acusados.
La lectura de la sentencia comenzó esta tarde en medio de grandes expectativas en el gran salón de los Museos Vaticanos donde tuvieron lugar las audiencias.
El Tribunal presidido por el fiscal italiano en retiro Giuseppe Pignatone, leyo la sentencia.
El cardenal Becciu, que fue brazo derecho como Sustituto de la Secretaría de Estado vaticana, fue practicamente destiuído por el Papa en 2020 de sus funciones en el organismo central de la Curia Roma.
El "tercer hombre" en cargo y poder en la Santa Sede debió renunciar a su cargo y por decisión del Papa conserva el título de miembro del Consejo Cardenalicio pero no puede votar en el próximo Cónclave.
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