Una semana de pompa para proyectar la confianza de Putin

Con su ejército a la ofensiva en Ucrania y toda forma de disidencia dentro de Rusia firmemente reprimida, el presidente Vladimir Putin ocupará un lugar central esta semana en dos eventos importantes que mostrarán su dominio sobre la política del país y su determinación de ganar en Ucrania.

El martes, Putin, de 71 años, comenzará formalmente su quinto mandato como presidente de Rusia en una ceremonia de inauguración muy coreografiada en el Kremlin.

Militares rusos participan en el ensayo general del desfile militar del día de la Victoria en la Plaza Roja de Moscú, Rusia, el 5 de mayo de 2024. Maxim Shipenkov/Pool vía REUTERSMilitares rusos participan en el ensayo general del desfile militar del día de la Victoria en la Plaza Roja de Moscú, Rusia, el 5 de mayo de 2024. Maxim Shipenkov/Pool vía REUTERS

El jueves presidirá el desfile del Día de la Victoria en la Plaza Roja, una demostración anual de poderío militar que en los últimos dos años buscó vincular simbólicamente la guerra de Rusia en Ucrania con la victoria soviética sobre la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.

El presidente ruso Vladimir Putin pronuncia un discurso durante su ceremonia de inauguración en el Kremlin en Moscú, Rusia, el 7 de mayo de 2024. Sputnik/Alexander Kazakov/Pool vía REUTERSEl presidente ruso Vladimir Putin pronuncia un discurso durante su ceremonia de inauguración en el Kremlin en Moscú, Rusia, el 7 de mayo de 2024. Sputnik/Alexander Kazakov/Pool vía REUTERS

También se espera que el Kremlin nomine a un primer ministro y cinco ministros clave, incluidos los de Asuntos Exteriores y Defensa, aunque los funcionarios en esos seis puestos podrían simplemente ser nominados de nuevo.

La forma del próximo gobierno ruso proporcionará señales sobre el rumbo del país en los próximos años.

La asunción

Putin ganó su quinto mandato en marzo en una elección formal que las naciones occidentales desestimaron como una farsa.

De todos modos, la ceremonia será triunfal y llena de simbolismo.

Los legisladores, gobernadores regionales, líderes religiosos, funcionarios de alto rango y otros invitados del país esperarán a que Putin llegue al Gran Palacio del Kremlin desde el cercano Palacio del Senado, donde se encuentra la oficina presidencial.

Putin será transportado en la nueva versión mejorada de su limusina de fabricación rusa, informaron los medios estatales, proyectando el mensaje de que Rusia es capaz de sostenerse a pesar de estar en gran medida aislada de los mercados occidentales.

Cuando Putin entre, cientos de funcionarios e invitados rusos estarán parados a los lados mientras la orquesta tocará una melodía ceremonial.

Putin leerá un juramento, en el que jurará “respetar y salvaguardar los derechos y libertades del hombre y del ciudadano”.

Luego pronunciará un breve discurso.

Esta vez, la ceremonia probablemente incluirá nuevos elementos que destaquen que Rusia es un país que libra una guerra en Ucrania.

Entre los invitados probablemente se encontrarán soldados y oficiales que participan en ella.

Dia de la Victoria

La inauguración tendrá lugar sólo dos días antes del desfile anual del Día de la Victoria.

A diferencia del año anterior, cuando Rusia anticipaba ansiosamente la contraofensiva de Ucrania, este año Putin observará el desfile de tanques y soldados por la Plaza Roja en un estado mucho más envalentonado.

Desde el otoño pasado, sus tropas han estado a la ofensiva en Ucrania, atacando constantemente las agotadas defensas ucranianas.

En las últimas semanas, Rusia ha estado capturando una aldea tras otra, amenazando las líneas logísticas de Ucrania al oeste de la ciudad de Avdiivka.

Los resultados de estos avances se han exhibido en Moscú, donde las autoridades han exhibido armamento suministrado por Occidente capturado en Ucrania: tanques (con sus cañones doblados hacia abajo para demostrar la derrota), vehículos blindados y otros equipos.

"¡Nuestra victoria es inevitable!" decía uno de los carteles mientras la gente pasaba tomando fotografías de los tanques, obuses y dragaminas estadounidenses Abrams y Leopard alemanes.

Un mensaje en una pantalla decía:

"Los miembros del personal de las embajadas de Estados Unidos, Alemania, Francia y Polonia pueden saltarse la cola".

A diferencia de los desfiles anteriores a la guerra, se espera que asistan sólo líderes de un puñado de antiguos estados soviéticos y de países de estatura limitada en el ámbito internacional.

Entre ellos se incluyen líderes de Laos en Asia, Guinea-Bissau en África y Cuba en América.

Han confirmado su asistencia los antiguos estados soviéticos de Kazajstán, Tayikistán, Bielorrusia, Turkmenistán y Kirguistán.

Cambio de gabinete

Durante las últimas semanas, funcionarios del gobierno y observadores del Kremlin han estado adivinando cómo serían el nuevo gabinete y la nueva administración de Putin.

En un país donde los puestos burocráticos a menudo se basan en conexiones personales y lealtad, los puestos ministeriales y otros puestos de alto rango en el Kremlin tienen mucho peso.

El presidente ruso Vladimir Putin camina antes de su ceremonia de inauguración en el Kremlin en Moscú, Rusia, el 7 de mayo de 2024. Sputnik/Alexander Vilf/Kremlin vía REUTERSEl presidente ruso Vladimir Putin camina antes de su ceremonia de inauguración en el Kremlin en Moscú, Rusia, el 7 de mayo de 2024. Sputnik/Alexander Vilf/Kremlin vía REUTERS

Por ley, el gabinete de ministros debe renunciar después de la toma de posesión de Putin.

Luego tendrá que nominar a la Duma estatal, la cámara baja del parlamento, un candidato para el puesto de primer ministro, quien luego nominará a los ministros del gobierno.

Varios ministros clave, incluidos los responsables de defensa y política exterior, son nominados por Putin para ser aprobados por el Consejo de la Federación, la cámara alta del parlamento.

No hay indicios de que Putin vaya a reemplazar al Primer Ministro Mikhail Mishustin; Sergei Shoigu, ministro de Defensa; o Sergey Lavrov, el ministro de Asuntos Exteriores.

Pero podría haber una sorpresa.

Incluso mantenerlos enviaría un mensaje poderoso: que Putin cree que tiene un equipo ganador y que el Kremlin está satisfecho con el progreso actual de Rusia en Ucrania y su posición internacional.

c.2024 The New York Times Company

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