¿Cuánto tiempo puede vivir una persona con insuficiencia cardíaca?
¿Cuánto tiempo puede vivir una persona con insuficiencia cardíaca?
Lo primero que debemos saber es que la insuficiencia cardíaca, es decir, cuando el corazón no bombea sangre de forma eficaz, puede tener diversos orígenes y atravesar diferentes etapas.
Puede también ser ocasional o crónica. Cada paciente cardíaco entablará un diálogo profundo con el cardiólogo para conocer su condición, el tratamiento a seguir y los objetivos a alcanzar.
La página de la Clínica Mayo de los Estados Unidos menciona dos clasificaciones del grado de la enfermedad cardíaca, que en conjunto son avaladas por todos los cardiólogos.
Una es la establecida por la Asociación Cardíaca de Nueva York y otra por el Colegio Estadounidense de Cardiología/Asociación Americana del Corazón.
Los grados de la enfermedad cardíaca
Según el artículo de la prestigiosa clínica estadounidense, la clasificación establecida por la Asociación Cardíaca de Nueva York establece cuatro clases:
- Clase 1. No hay síntomas.
- Clase 2. Las actividades cotidianas se realizan sin dificultad, pero ante un esfuerzo hay falta el aire o cansancio.
- Clase 3. Se hace difícil realizar actividades diarias.
- Clase 4. Hay falta de aire incluso en estado de reposo (esta es la categoría más grave).
En cuanto a la clasificación del Colegio Estadounidense de Cardiología/Asociación Americana del Corazón, esta entidad habla de cuatro etapas:
- Etapa A. No hay síntomas pero sí factores de riesgo.
- Etapa B. Hay enfermedad cardíaca sin síntomas.
- Etapa C. Hay enfermedad cardíaca, signos y síntomas de insuficiencia.
- Etapa D. Insuficiencia cardíaca avanzada que requiere tratamientos especializados.
Qué esperanzas de vida tiene una persona con insuficiencia cardíaca
Una publicación del sitio Medical News Today responde esta pregunta atendiendo las diferentes etapas de la enfermedad. Veamos.
Ya dijimos que hasta la etapa C no se presentan síntomas, ahora sumamos un dato importante: en el trayecto de una etapa a la otra (de la etapa A a la B y así hasta la D) se calcula que se pierden 5 años de vida (o más). En el caso de la Etapa D, el cuadro puede llegar a requerir un trasplante o hasta cuidados paliativos.
- Etapa A. No se presenta disfunción del corazón, pero hay altas posibilidades de desarrollarla si existe una alta presión arterial crónica, diabetes o enfermedad coronaria. Estos pacientes no tienen problemas en la estructura del corazón pero sí pueden tener síntomas de esas otras afecciones.
- Etapa B. Hay una reducción de la función de bombeo del corazón que produce un agrandamiento del ventrículo izquierdo pero aún no presenta síntomas. Puede ser consecuencia de un ataque cardíaco previo no detectado.
- Etapa C. Aparecen los síntomas de una enfermedad coronaria subyacente, como fatiga o disnea por disfunción del ventrículo izquierdo o la cámara de bombeo. Este nivel también incluye a personas que ya no muestran síntomas porque están en tratamiento.
- Etapa D. La enfermedad cardíaca está avanzada y muestra síntomas aún en estado de reposo. En este caso puede requerirse desde un soporte circulatorio mecánico hasta un trasplante o cuidados paliativos.
Cómo prevenir o demorar el avance de la enfermedad
Además de la atención profesional, siempre hay recursos en nuestras manos para evitar o demorar el paso de una a otra etapa.
1) Mantener un peso saludable. Es importante consultar con el cardiólogo cual sería nuestro peso ideal.
2) Hacer ejercicios con regularidad. La Asociación Americana del Corazón recomienda 150 minutos de ejercicio moderado cada semana (consultar un plan personalizado con el cardiólogo).
3) Control del estrés. La meditación, la psicoterapia y las técnicas de relajación pueden ayudar.
4) Dieta saludable para el corazón. Consumir alimentos bajos en grasas trans, ricos en granos integrales y bajos en sodio y colesterol.
5) Control regular de la presión arterial. Utilizar tensiómetros domésticos para llevar un registro continuo y regular en casa.
6) Vacunas. Asegurarse de estar al día en las vacunas contra la influenza y la neumonía neumocócica.
7) Controlar los factores de riesgo. Entre ellos, hipertensión, tabaquismo, consumo de alcohol y drogas, y diabetes.
Comments are closed.