El club Puyutano confirmó la buena nueva tras meses de espera
No fue el mejor año en lo deportivo para Desamparados, pero pareciera que la crisis del agua quedará atrás.
La crisis hídrica histórica que atraviesa San Juan afectó a todos los sectores y el deportivo no fue la excepción. En septiembre del 2020, el pozo de agua que abastecía al Club Sportivo Desamparados se quedó seco y, para colmo de males, se quemó la bomba extractora. En enero del 2021 comenzaron los trabajos para tratar de arreglar el problema, pero la solución fue perforar más profundo para llegar hasta la napa y conseguir agua. A 10 meses de esa tarea, finalmente este viernes el club puso en funcionamiento la nueva perforación y es la esperanza de que el verde césped del Serpentario vuelva a crecer.
A través de dos posteos en sus redes sociales, el club Puyutano confirmó la buena nueva tras meses de espera y de desesperación, ya que el Estadio José Eduardo Nehín había perdido en este tiempo el verde césped, lo que motivó que toda la campaña pasada se jugara fuera de casa.
Con la perforación realizada hallaron agua a los 80 metros de profundidad. En tanto que la bomba de agua fue adquirida el año pasado tras haber invertido un total de $600.000. Las estimaciones que realizan desde el club es que puedan tomar agua desde este pozo por más de 10 años.
La gestión del presidente del club Juan Valiente fue muy criticada por esta situación, ya que debido al mal estado general del campo de juego, el Víbora debió trasladar su localía a otro lugar como lo fue el Estadio San Juan del Bicentenario.