Argentina entregó todo y le jugó de igual a igual a Brasil, candidato a ganar el Mundial, pero cayó 3-1 (16-25, 25-23, 22-25 y 21-25) en Polonia y se despidió en cuartos.
Argentina entregó todo y le jugó de igual a igual a Brasil pero cayó 3-1 (16-25, 25-23, 25-22 y 21-25) en Polonia y se despidió del Mundial. Nada que reprocharle al equipo de Marcelo Méndez que estuvo a la altura ante un seleccionado que llegó a la final en los últimos cinco Mundiales y es candidato al título. Agustín Loser y Facundo Conte, de lo mejor de la Albiceleste, aunque no al nivel tremendo de Yoandy Leal, que se despachó con 25 puntos, y del inoxidable Wallace de Souza. Ahora, Brasil jugará la semifinal ante el ganador de Polonia, bicampeón del mundo, y Estados Unidos, que se enfrentarán en la tarde de este jueves.
Brasil se quedó por 25-16 el primer set, el único que no fue parejo. Se vio una Argentina incomoda ante un rival muy seguro. La diferencia estuvo sobre todo desde la mitad del set, cuando se puso 14 a 10 sobre la Albiceleste, hasta el final donde amplió la diferencia. Después, Argentina mejoró en el bloqueo y con un Agustín Loser encendido, se impuso por 25 a 23 en el segundo set para empatar parcialmente el encuentro. Dejó atrás la superioridad marcada por su rival en el primero y dominó el marcador casi todo el set.
Brasil estuvo muy sólido en el tercer set y parecía que se lo iba a llevar por varios puntos, pero Argentina, con mucho corazón y orden, reaccionó pero no le alcanzó y su rival se llevó el set por 25 a 22. Los de camiseta amarilla y verde ganaban 20 a 14 y el equipo de Méndez se puso a dos puntos y lo terminó perdiendo por tres. Y en un cuarto muy parejo donde Argentina estuvo por momentos arriba, Brasil se impuso en el marcador en el final y lo mantuvo hasta el final para ganar el set (25 a 21) y el partido. En estos últimos sets, demostró un ataque y saque muy agresivo.
Argentina, que le había ganado 3-2 a Brasil en el último enfrentamiento para ganarle la medalla de bronce de los Juegos Olímpicos de Tokio, no pudo repetir la hazaña. La mejor posición de la Albiceleste, hoy séptima mejor del mundo (Brasil tercera) según el ranking de la Federación Internacional de Voleibol, en un Mundial fue el tercer lugar que consiguió en la edición de 1982 en Séul, cuando superó a Japón para conseguirlo. De todas maneras, Argentina hizo un buen mundial, logrando meterse entre los ocho mejores del Mundial después de 20 años.
